Nació en Corrientes, el 29 de agosto de 1857. Fueron sus padres Manuel Vicente Fernández, acaudalado comerciante español, y Rosa Gallino, proveniente de familia de antigua tradición local. Hizo sus estudios primarios en su ciudad natal, y en 1865, los continuó en Buenos Aires en la Escuela de Catedral al Norte dirigida por José Manuel Estrada. Pasó luego al Colegio Nacional de Buenos Aires, y se inscribió en la Facultad de Medicina de donde egresó doctorado el 24 de setiembre de 1882. Su tesis versó sobre la Contribución al estudio del tratamiento antiséptico de la fiebre puerperal.
En su período estudiantil escribió una memoria titulada Estadística Médica de la ciudad de Corrientes desde 1867 hasta el año 1879, premiada por el Círculo Médico Argentino y que mereció la medalla de plata, porque según el veredicto del Jurado, tenía por base “observaciones e investigaciones originales y revelaba datos ignorados de la medicina”.
En plena juventud tomó el ejemplo del Dr. Ignác Semmelweis (1818-1865), y muchas veces contra la voluntad del medio, trató de imponer reglas de antisepsia por las que bregó siendo practicante mayor en la maternidad del Hospital de Mujeres.
Fue a Europa a perfeccionarse en ginecología, y en París concurrió asiduamente a los servicios del Dr. Charles Pajot (1816-1896), y de Stéphane Tarnier (1828-1897), Theodore Gaillard (1832-1903) y Samuel-Jean Pozzi (1846-1918). Allí escribió un importante trabajo, La Fiebre Puerperal, que dedicó a su amigo y maestro doctor Pedro A. Pardo. También asistió a las clínicas de cirugía de Jules Emile Péan (1830-1898) y de León Clément Le Fort (1829-1893).
De regreso al país, en 1884, fue designado profesor suplente de Obstetricia en la Facultad de Medicina, en reemplazo del doctor Pardo, dictándola durante los años de 1885 a 1886; sus cursos fueron agradecidos por los discípulos en una manifestación pública.
En 1890, fue nombrado miembro de la Academia de Ciencias Médicas de Buenos Aires, y varios años después, ocupó como titular la cátedra cuya suplencia ejerció, y asimismo la dirección de la Escuela de Parteras, recién fundada, que de inmediato hizo bautizar con el nombre de “Maternidad Pedro Antonio Pardo”.
Como académico, fue designado delegado de la corporación ante el Instituto Libre de Enseñanza Secundaria, y formó parte de la Junta directiva del Hospital Nacional de Clínicas. A iniciativa suya se creó la cátedra de Ginecología, que inauguró el profesor Jacob de Tezanos Pinto, a quien reemplazó Enrique Bazterrica, que le dio gran lucimiento por ser de los más destacados operadores de la época.
En 1900, llegó la honra y la responsabilidad del decanato de la Facultad, y dos años después, se retiró de la docencia universitaria para ocupar el Ministerio de Justicia e Instrucción Pública, cargo en el que sucedió al doctor Osvaldo Magnasco, durante la segunda presidencia del general Roca.
Breve fue su paso por el ministerio, pero vasta y fecunda su obra. En enero de 1903, fundó el Seminario Pedagógico, que habría de transformarse en el Instituto Nacional del Profesorado Secundario. Contrató para la nueva casa de estudios a profesores alemanes, entre ellos, el doctor Wilhelm Keiper, de perdurable memoria. Obtuvo la ley de edificación escolar y amplió locales existentes, construyó otros nuevos por valor de siete millones de pesos; fundó las escuelas normales regionales de Catamarca, Corrientes y San Luis con internado y régimen tutorial. Reformó los planes de estudios para ponerlos a tono con los avances registrados en otras naciones.
En noviembre de 1903, envió al Congreso su proyecto de ley de la segunda enseñanza acompañado de una extensa memoria con los Antecedentes sobre enseñanza secundaria y normal en la República Argentina, desde 1863 hasta aquel año, fuente imprescindible para el estudio del origen y desarrollo de estas ramas de la enseñanza. Tales antecedentes sirvieron de base para la elaboración de los nuevos decretos del 17 y 28 de enero de 1903, que no llegaron a aplicarse.
Encaró sucesivamente los problemas de la Universidad de Córdoba y anticipó como problema del futuro la nacionalización de la Universidad Provincial de La Plata.
Fundó y organizó la Escuela Reformatorio de Menores Varones de Marcos Paz; inició como decano y realizó como ministro la construcción de la Escuela Práctica de Medicina y la Morgue. Creó las Escuelas de Comercio de Bahía Blanca y Concordia.
El 16 de mayo de 1904, cuando colocaba la piedra fundamental para la construcción del actual Palacio de Justicia, frente a la Plaza Lavalle, sufrió un ataque apoplético, del que se recuperó algún tiempo después. El general Roca no quiso desprenderse de este colaborador y, con la esperanza de su restablecimiento, designó ministro interino al doctor Joaquín V. González, quien accedió a iniciar su ministerio histórico.
El doctor Fernández, retirado de la función pública, murió en Olivos (Pcia. de Buenos Aires), el 2 de enero de 1911. Se había casado con Rosa Anchorena. El Instituto Nacional del Profesorado Secundario por él creado, que es actualmente el Instituto de Enseñanza Superior en Lenguas Vivas, lleva su nombre.
Fuente
Cutolo, Vicente Osvaldo – Nuevo Diccionario Biográfico Argentino – Buenos Aires (1971).
Efemérides – Patricios de Vuelta de Obligado
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Raffo, Juan Carlos – Juan Ramón Fernández - Historias de Corrientes.
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