Cayetano Silva

Cayetano Silva (1868-1920)

El 7 de agosto de 1868, nació el autor de la “Marcha de San Lorenzo”, hijo de Natalia Silva, una esclava de Emilia Silva, en cuya casa se crió la madre, que le dio el apellido.  Vio la luz  en San Carlos, Departamento de Maldonado, Uruguay, una Villa fundada en 1763 por el General y Gobernador Español don Pedro de Cevallos, siendo la única población del interior que no pudieron conquistar los ingleses, en sus invasiones de principios del Siglo XIX.  Es Capital artesanal y agropecuaria de la región, y en el año 1953, se construyó en ella un espacio de esparcimiento y la cultura: un Teatro al Aire Libre que  en su honor, lleva su nombre.

Desde muy niño mostró vocación por la música, comenzando a estudiar con el Maestro Rinaldi, y cuando tenía apenas 12 años, dicho profesor lo incorporó a su Banda Popular para tocar el pistón.   Su madre y Emilia, se preocuparon de mejorar su educación musical, y lo ingresaron en la Escuela de Artes y Oficios, donde cuando tenía 16 años, bajo la Dirección del maestro Gerardo Grasso, el italiano de Caposele autor entre otros del  Pericón Nacional Uruguayo, estudió solfeo y corno, y durante cuatro años violín, sin abandonar el pistón..

En 1888, esto es cuando tenía 20 años, marchó a Río Grande do Sur (Brasil), ingresando a la Banda del Sampaio, buque de la Armada Brasileña.  Y tiempo después a Buenos Aires, donde estudió en la Escuela de Música de Pablo Beutti.  Allí fue Maestro de Bandas en diversos regimientos militares.  Posteriormente se trasladó a San Juan organizando una Banda, y luego a Mendoza, donde creó la Banda del Cuerpo de Bomberos.  En Rosario fue Director de la Banda del Regimiento Nº 7 de Infantería “Cnl Conde”.   Allí contrajo matrimonio con Filomena Santanelli, con la que tuvo ocho hijos. En 1898, es contratado por la Sociedad Italiana de Venado Tuerto, provincia de Santa Fe y se traslada con su familia a dicha ciudad donde funda un centro lírico, enseña música y crea La Rondalla, con la que actúa en el Carnaval de 1900.  También escribe la música de las obras teatrales como Canillita y Cédulas de San Juan de su compatriota y amigo Florencio Sánchez.  Estas obras son estrenadas en Rosario con mucho éxito.

Venado Tuerto debe su curioso nombre a que, en un fortín de la zona, fue criado por soldados un venado guacho al que le faltaba un ojo perdido en un ataque sufrido ante los indígenas.  Desde entonces, cada vez que se aparecía en el fortín, era aviso seguro de la proximidad del malón, hecho que permitía a los soldados refugiarse y defenderse del ataque.  En épocas de sequía, conducía a las tropas por buenos pastos y aguas lo que le valió el reconocimiento de aquellos hombres.  Cuando esta historia le fue narrada a Eduardo Casey, decidió que el pueblo a fundar se llamaría Venado Tuerto.  Está al Sur de la Provincia de Santa Fe, a 65 km de Rosario, y fue fundada el 26 de abril de 1884 por Eduardo Casey, llegando a categoría de ciudad el 16 de diciembre de 1935.  Ha mantenido hasta ahora su denominación originaria, a pesar de varios intentos de cambiarle su extraño nombre.  Hoy hay allí un Museo Regional y Archivo Histórico que lleva su nombre, en el cruce de las rutas 8 y 33, en un pequeño parque,  donde se encuentra la casa en que Silva vivió, y donde por primera vez se ejecutó su más importante obra.  Es también sede de la Banda Municipal.  Está ubicada en la calle Maipú 966, y fue declarada Monumento Histórico por la Municipalidad de Venado Tuerto en el año 1972.

La famosa Marcha de San Lorenzo, que es como un Segundo Himno Nacional Argentino, fue la culminación de una serie de marchas militares que había comenzado a componer Cayetano Silva.  La compuso en bancos de la plaza San Martín, terminando de hacerlo el 1 de enero de 1902, y la tocó por primera vez en su domicilio, con su violín,  frente a su esposa y una hija muy pequeña.  Se la dedicó al coronel Pablo Riccheri, por entonces Ministro de Guerra, quien la declaró Marcha Oficial del Ejército Argentino, el 30 de octubre de 1902, después de ser escuchada en la inauguración del Monumento al General San Martín, en la ciudad de Santa Fe,  en presencia del Presidente Julio Argentino Roca.

La compuso en alusión al Combate de San Lorenzo, del 3 de febrero de 1813, bautismo de fuego de los Granaderos del General José de San Martín.  El mismo tuvo lugar a 26 kilómetros al Norte de Rosario, cuando habían desembarcado 250 españoles que buscaron instalarse en el Colegio de San Carlos; siendo sorprendidos allí por los granaderos, que los atacaron de un lado y otro del colegio, obligándolos a retirarse.  Fue un combate de unos pocos minutos, en el cual el caballo de San Martín cayó, aplastando una pierna del Libertador, y cuando una bayoneta enemiga se aprestaba para matarlo, el sargento Juan Bautista Cabral, se interpuso salvando su vida, pero muriendo él en la acción.  La marcha cumple un doble propósito de exaltar al Libertador, y al mismo tiempo al sargento Cabral,  que dio su vida por su Jefe.

Entre el conjunto de marchas creadas por Cayetano Silva se destacan, entre otras, la marcha de “Curupaity”, inspirada en la guerra del Paraguay, la marcha de “San Genaro” -localidad próxima a Rosario-,  “Río Negro”, “22 de Julio” y “Tuyutí”.

Es de lamentar que desde la creación de esta marcha, la misma y su autor, siguieron caminos muy distintos.  Pues apremiado por necesidades económicas, con una familia numerosa, debió vender sus derechos a una casa editora de música de Buenos Aires, por la módica suma de cincuenta pesos.  En una época en que no existían leyes que ampararan los Derechos de Autor.

Cuando gestionaba su reincorporación al ejército se le prometió la dirección de la Banda de la Policía de Rosario pero los azares de la política le quitaron las probabilidades, sufriendo un duro golpe moral que le afectó para precipitar su muerte.  Falleció en Rosario en estado de indigencia el 12 de enero de 1920, es decir a los 52 años de edad.  Fue sepultado en el Cementerio “El Salvador” de Rosario, aunque muchos años después, en 1997, fueron trasladados al Cementerio Municipal de Venado Tuerto, a raíz de gestión de la Comisión de Amigos de la Casa Histórica Cayetano A. Silva. 

En 1945 la ciudad de Buenos Aires le dio su nombre a un Pasaje del bario de Liniers, como también lo dio a Carlos Javier Benielli, amigo y vecino de Silva en Venado Tuerto, que en 1907 dio letra a esta música y a otros temas suyos.

La miseria también persiguió a su numerosa familia, pues su viuda debió esperar más de cuatro años, para que le otorgaran una pensión, muy modesta también.  Pero mientras la miseria caía sobre el autor y su núcleo familiar, la marcha que compuso se hacía cada vez más famosa, y se escuchaba con mayor frecuencia en cuarteles y escuelas, no solo argentinas, sino también en otros países, en especial Uruguay, Alemania, Brasil, Polonia y Gran Bretaña.

El 14 de enero de 1946 por Decreto 2820/467, firmado por el Presidente de la Nación, en esa época el General Edelmiro J. Farrell, la Marcha de San Lorenzo pasó a nivel de Marcha Presidencial, notificándose a la familia por el Coronel Franklin Lucero.

En Gran Bretaña, se ejecutó en la ceremonia de Coronación de Jorge V, y también en la de la actual Reina Isabel, y se lo hace habitualmente en los cambios de guardia en el Palacio de Buckinghan, modalidad que se suspendió en la guerra por las Malvinas. Una cosa curiosa es que el ejército alemán la tocó al entrar en París, marchando por sus calles, y  años después la ordenó tocar el General Eisenhower, luego del desembarco en Normandía en 1944, para levantar el ánimo de sus tropas, que finalmente liberaron a los franceses.”

Fuente

Benarós, León – Revista Todo es Historia, Nº 171, Enero 1990, Pag. 62

Efemérides – Patricios de Vuelta de Obligado.

Portal www.revisionistas.com.ar

Sica Dell’Isola, Nelson – Cayetano Alberto Silva, Un carolino ilustre.

Silva, A. Cayetano y Horacio A. Silva – Vida y obra de Cayetano Alberto Silva – Buenos Aires (1997).

Venado Tuerto – Portal del gobierno de la ciudad.

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